Tras meses de agónica espera, el Kaunselord más Renteril (de hecho el único que hay y habrá entre la membresía) vuelve a lucir la cruz albiceleste entre sus piernas. NO, no se ha tatuado el escudo de BMW en la po... es que se ha comprado una K75 que sois muy malepensantes y a veces hasta maledicentes.
El bebé ha nacido negro (se especula con la coloración de la madre), veinteañero, murciano y le han llamado Ladrillo por aquello de los flying bricks.
La premura, la ensalada de McDonalds y una reunión a la que voy a llegar tarde me impiden adornarme más en los detalles del evento, pero para eso, nuestro amadísimo Rentero se las pinta solo. Mañana más, y mientras tanto:
¡Enhorabuena!
¡Enhorabuena!
2 comentarios:
Bueno, bueno, pues muchas felicidades por tu reciente adquisicón y que la disfute en buena compañía durante muchos años, tiene una pinta estupenda El Ladrillo Negro
Muchas gracias, querido primo.
Si que es verdad que pese a sus añazos el Ladrillo esta en plena forma (como su nuevo dueño, por otra aparte), es ágil, elegante, deportiva, clásica(como su nuevo dueño, por otra parte) y con ese aspecto de malote rebelde pero no revolucionario(como su nuevo dueño... etc.).
BMW, I´m back!!!
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